A las personas se las evalúa no por lo que dicen sino por lo
que realmente hacen, por cómo se comportan. La confianza se da cuando hay una
coincidencia entre lo que se dice y lo que se hace. Si el pensamiento, las
ideas y la conducta de la persona coinciden se genera confianza y se considera
que la persona es integra.
La confianza es la creencia que una persona tiene en otra de
qué en unas circunstancias determinadas se comportará de una forma determinada.
Esta creencia nos viene determinada bien por una experiencia propia o por
referencias de otros.
Las relaciones profesionales se basan mucho en la confianza
mutua en el sentido de qué el qué contrata confía en el profesional para
realizar el trabajo y el profesional confía que cobrará al final del mismo. Por
tanto, de ahí la necesidad de generar elementos de credibilidad y confiabilidad
sobre los que articular nuestra confianza como profesionales.
La finalidad de crear y mantener un halo de confianza es múltiple
por diversas circunstancias:
- Nos dota de credibilidad.
- Nos sirve de presentación.
- Ayuda a que nos contraten.
- Nos da continuidad.
- Crea vínculos emocionales.
La confianza se gana en pequeñas dosis. No solemos depositar confianza en la primera persona que conocemos. Necesitamos un tiempo para que la persona demuestre que merece nuestra confianza y que merece que establezcamos una relación personal o profesional.
Cuando conocemos a una persona tratamos de averiguar cosas de la misma. Esta averiguación la hacemos por diferentes vías:
- Preguntamos a nuestro entorno próximo si la conocen y han tenido relaciones con la misma.
- Le podemos pedir que nos de referencias de sus clientes y podemos acudir a preguntar directamente a alguno de ellos.
- Si es un nuevo emprendedor que todavía no tiene clientes, le podemos pedir que nos permita preguntar en alguno de sus anteriores trabajos.
- Observamos si tiene una página web o un blog. Los escritos dejan mucho del pensamiento y de la personalidad de una persona.
- Si ha realizado publicaciones de artículos o tiene libros escritos o participa en algún medio de comunicación, acudimos a los mismos con la misma intención: informarnos sobre el posible comportamiento de la persona.
La finalidad de todo esto es conocer a la persona y
fundamentalmente si tiene coherencia en su comportamiento. Si con la rectitud y
coherencia del comportamiento se ha ganado una credibilidad, la podríamos
asumir en espera de que su comportamiento sea similar y por lo tanto los
resultados también.
Cuando tengas colaboradores, genera confianza de ellos hacia ti. La
confianza que les generes les provocara seguridad. Ello hace que las personas
se comprometan de una forma más decidida en el trabajo y sientan una mayor satisfacción
en el. Es un gran apoyo para los colaboradores o empleados poder tener un
superior en el que confiar en cualquier circunstancia. Saben que hay alguien
que se preocupa por ellos y al que pueden acudir en buscar de orientación y
ayuda. Es tremendamente negativo crear climas de desconfianza entre los
colaboradores y el superior. Genera en los colaboradores estados de ansiedad y estrés.
No saben a qué atenerse. Se provoca una corrosión del carácter.
La confianza se gana en pequeñas dosis, pero se pierde de
forma rápida. Defraudar a un cliente con actos y comportamientos contrarios a
los que se esperan, es grave. Generamos sentimientos de engaño que provocan un
rechazo automático de la persona. No solo habremos perdido un cliente, sino que
este puede empezar a comunicar aspectos negativos de nosotros, lo que
nos pondría en dificultades en nuestra vida profesional.
Una cosa a tener en cuenta es que no podemos pretender
generar confianza en todas las personas. Al igual que no le caemos bien a todo
el mundo, tampoco vamos a provocar confianza en todo el mundo. Habrá personas a
las que lo que decimos, lo que hacemos y como lo hacemos no les guste. No
trataremos de cambiarlas, no lo conseguiremos. Admitamos que no podemos tener
la confianza de todo el mundo y busquemos por otro lado. De igual manera, por nuestra
parte no es bueno confiar en todo el mundo Tomemos nuestras precauciones. Aseguremos
las ganancias de nuestro trabajo.